Hoy tenemos la noticia de que la versión de Linux 5.0 está recibiendo la que sería la última de sus actualizaciones. Tal como se lee, este núcleo del sistema operativo conocido por ser de código abierto, pasará a mejor vida; pues la compañía no proporcionará nuevas actualizaciones y recomienda, por otro lado, el saltar cuanto antes a la siguiente.
Teniendo en la mira a la siguiente versión, Linux 5.0 ahora pasará a la historia; lo que cualquier usuario que disponga del mismo debe hacer ahora es el de subir un punto y tomar la versión 5.1 en adelante. Lo que Linux ha sacado hoy no es más que la última versión de mantenimiento de la pasada serie.
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Adiós, adiós, Linux 5.0
Algunos expertos frente a la noticia tienen opiniones divididas. Alguno apuntan a que lo más sensato es cambiar directamente a la versión 5.1; otros, menos alarmados, indican que sólo lo hagan aquellos cuyas compañías se tarden en lanzar sus propias actualizaciones en el ámbito de Linux comercial.
Las que ofrezcan por su propia cuenta paquetes o parches que arreglen posibles problemas, no deberían presentar inconvenientes. Como sea, siguiendo las palabras del propio Greg Kroah-Hartman, aquel que se encargaba del mantenimiento de Linux 5.0, al final lo más razonable es cambiar de versión y listo. Más vale prevenir que currar, dicen.
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