Los hackers siempre han existido, unos más capaces que otros ocasionando grandes inconveniencias a sus víctimas, a los piratas informáticos les interesa más el demostrar que pueden manejar o controlar cualquier dispositivo ajeno y sacar dinero de él, así lo afirma Pablo Teijeira, delegado de España y Portugal de Sophos, empresa británica de seguridad digital.
Las personas que poseen webcams apenas se preocupan por el cuidado de sus dispositivos y son muy vulnerables, la mejor manera de quedar expuestos es conectar nuestros aparatos a una conexión wi-fi pública lo cual es irónico para Tejeira, parece que los fabricantes de los dispositivos no han captado nada en treinta años de seguridad.
Lo interesante de la actividad pirata de las webcams recalca sobre la industrialización de ataques a teléfonos móviles, en ese entorno es lógico que interese el acceso a las credenciales bancarias pero no tanto para que el individuo que ha hackeado a su víctima robe dinero, sino para revender en grandes lotes a quienes les interese. Con el pasar el tiempo las personas dedicadas a este mundo, desean controlar desde lejos las cámaras y los receptores de audio ocasionando problemas al público en general.
Tejeira nos da como ejemplo que existen páginas web dedicadas principalmente a ver lo que están grabando en cámaras de teléfonos personales y así conseguir tráfico de visitas. Esto es preocupante ya que si estamos tan vulnerables el daño que puede traernos hacia nuestras vidas es catastrófico.
Os recomiendo alejarse de las redes Wi-Fi públicas para evitar cualquier problema de este entorno, tener un fuerte sistema de seguridad y ante todo, estar pendiente en relación a vuestra tecnología, Ordenadores, Tabletas, Teléfonos evitando futuros problemas y riesgos.
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